CONDUCTAS ANORMALES


CRIMINOLOGÍA DE LA PERSONALIDAD







INTRODUCCIÓN

Los Principales criterios en los que se fundamenta la criminología de la personalidad, son la normalidad y anormalidad. Al estudiar a otra persona o al hacer una introspección, podemos aplicar los conocimientos de cómo percibimos el exterior, lo que hemos aprendido, nuestras motivaciones y nuestro desarrollo, pero necesitamos encontrar una forma de caracterizar la cualidad distintiva de cada individuo específico. La mayoría de las personas se comportan de manera parecida, ya vimos en los tipos de personalidad que se sigue un patrón general, pero al mismo tiempo cada persona es individual, y cuando alguien se comporta de manera anormal, se percibe rápidamente. La principal labor del estudiante de Criminología y del criminólogo clínico es caracterizar la conducta individual: la personalidad.

CRIMINOLOGÍA DE LA PERSONALIDAD

La criminología de la personalidad es el término que suele designar que tiene un individuo, es la conducta que nos hace únicos, se define como un conjunto de características físicas, mentales y sociales de un individuo, es la conducta que nos difiere a otros, y que a su vez resulta de la intervención de factores endógenos y exógenos.
También estudia los cambios en el comportamiento de una persona, sus características individuales y su manera  de interactuar de hasta con su medio que lo rodea, así como la influencia que ejerce el ambiente sobre los individuos, como también como cambia el curso de su personalidad, en su vida o como se mantiene estable.

La mayoría de las personas se comportan de manera parecida, en los tipos de personalidad que se sigue un patrón general, pero al mismo tiempo cada persona es individual, y cuando alguien se comporta de manera anormal, se  percibe rápidamente.


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LA ANORMALIDAD Y SUS FUNDAMENTOS

Por lo que se refiere a la anormalidad, ya vimos los factores que influyen en ésta en los capítulos de factores criminógenos: endógenos y exógenos. KALISH considera que: "no hay algún punto determinado en el cual una persona deje de ser normal para convertirse en anormal. Ciertos tipos de conductas son, al menos en nuestra sociedad, claramente normales; algunas otras, claramente anormales; hay otras, que son fronterizas".
Asimismo menciona que:
Muchas personas profundamente perturbadas se comportan en forma normal la mayor parte del tiempo y casi todas las personas normales muestran ciertas maneras, ideas o conductas que podrían ser consideradas anormales; la perturbación emocional no es un estado de todo o nada; es una cuestión de grado. Los síntomas de perturbación emocional que se señalan a continuación se encuentran a menudo en personas normales, pero pueden producirse en forma exagerada en individuos profundamente perturbados.
 Y señala algunos puntos a considerar:

•  Depresión. Falta de ánimo para hacer las cosas, sentir que todo está mal en la vida;
• Preocupación y temor inapropiados. Hay personas que constantemente están preocupados por absolutamente todo, tienen una angustia hacia no poder resolver cosas, se les presentan dificultades frecuentes o incluso inventan situaciones para mantenerse ocupados en algo que les cause incomodidad. Este temor sobrepasa la realidad;
• Suspicacia. Desconfianza general, no confían en las personas, piensan que se les traicionará;
• Control emocional inadecuado. Llorar, asustarse, enojarse, incapacidad para mostrar los sentimientos, represión;
• Desrealización. Sentirse irreal, no pertenecer al propio cuerpo, no ser realmente una persona; Fantasía e ilusión. Entregarse a sueños y a las fantasías y no querer salir de esas ilusiones inalcanzables;
• Dureza emocional. No aceptar nuevas propuestas, dificultad para comportarse o pensar de manera distinta;
• Inestabilidad orgánica. Sufrir de fatigas, enfermedades y molestias que carecen de base clínica;
• Hostilidad. Ser propenso a peleas o discusiones;
• Ineficacia. Tratar de evitar la responsabilidad de la propia conducta, comportarse en forma inmadura;
• Infelicidad y tensión. Ver el mundo como un lugar difícil y tenso, y
• Relaciones personales destructivas. Vínculos con otras personas marcadas por la oposición, las discusiones, la tensión, la desconfianza, la dependencia excesiva u otros signos de inadecuación.
Después de ver estos criterios, si volvemos a la explicación realizada sobre la personalidad antisocial, podremos observar que muchas de las características anteriores encuadran en la psicopatía.
7 Cfr. KALISH, Richard A., op. cit., p. 161. S Jbidem, p. 162.


CARACTERÍSTICAS

La característica esencial del trastorno antisocial de la personalidad es un patrón general de desprecio y violación de los derechos de los demás, que comienza en la infancia o el principio de la adolescencia y continúa en la edad adulta.
*     Este patrón también ha sido denominado psicopatía, sociopatía o trastorno disocial de la personalidad. Para que se pueda establecer este diagnóstico el sujeto debe tener al menos 18 años y tener historia de algunos síntomas de un trastorno disocial antes de los 15 años.  
*      Los sujetos con un trastorno antisocial de la personalidad no logran adaptarse a las normas sociales en lo que respecta al comportamiento legal. Pueden perpetrar repetidamente actos que son motivo de detención (que puede o no producirse) como la destrucción de una propiedad, hostigar o robar a otros, o dedicarse a actividades ilegales.
*  Las personas con este trastorno desprecian los deseos, derechos o sentimientos de los demás. Frecuentemente, engañan y manipulan con tal de conseguir provecho o placer personales (p. ej., para obtener dinero, sexo o poder). Pueden mentir repetidamente, utilizar un alias, estafar a otros o simular una enfermedad. Se puede poner de manifiesto un patrón de impulsividad mediante la incapacidad para planificar el futuro.
* Las decisiones se toman sin pensar, sin prevenir nada y sin tener en cuenta las consecuencias para uno mismo o para los demás, lo que puede ocasionar cambios repentinos de trabajo, de lugar de residencia o de amistades.

*   Los sujetos con un trastorno antisocial de la personalidad tienden a ser irritables y agresivos y pueden tener peleas físicas repetidas o cometer actos de agresión.

   


    COMPONENTES DE LA PERSONALIDAD ANTISOCIAL

  •       Egocentrismo
  •       Agresividad
  •       Labilidad
  •       Indiferencia afectiva


EGOCENTRISMO es el sobre valor exagerado de la propia personalidad, considerada como el centro de atención de todo momento y situación. El sujeto está preocupado por él y comúnmente indiferente hacia los demás.

El egocentrismo se presenta de tres maneras:

v  Egocentrismo intelectual: En el que se exageran los propios pensamientos e ideas, de forma que no se aceptan las ideas de otras personas. Intenta imponer a los demás
v  Egocentrismo afectivo: Es en el que se intenta depositar la atención, el cariño y el cuidado de los que rodean al sujeto; si no lo logra, se muestra disgustado y celoso.
v  Egocentrismo social: En éste se busca ser el centro de atención, tener el papel de estrella y de víctima, el que tiene la autoridad, el líder.

AGRESIVIDAD, ROBERTO TOCAVEN proporciona información sobre el tema y apunta que: “la agresión constituye una fuerza básica inherente al hombre y necesaria para su supervivencia, es una característica normal del hombre con valores positivos y negativos”. Se pueden distinguir dos tipos de agresividad:

  •       La positiva. Cuando comprende la autoafirmación y dominación necesaria para realizar un objetivo social aceptable.
  •       La negativa. Cuando toma la forma de hostilidad y se expresa de manera incompatible con las pautas de conducta aceptas.


LABILIDAD, Lábil es aquello que se resbala o se escurre con facilidad. Una persona lábil es poco estable, poco firme en su carácter. Indica su modo que consiste en ser inestable respecto a las emociones y a su cambio de pareja, de trabajo, de lugar, etc.

INDIFERENCIA AFECTIVA, La indiferencia afectiva es la ausencia de sentimiento, consiste en la distorsión de expresión de las emociones. También es llamada como aplanamiento afectivo, falta de emotividad o inhibición de los afectos.

FACTORES SOMÁTICOS: Son endógenos los que nacen con el sujeto y actúan hacia el medio exterior produciendo ciertos resultados. Existe relación entre la actividad del organismo con las conductas antisociales. Se refieren a los cambios en la estructura y funcionamiento corporal, así como las anomalías o defectos y enfermedades corporales, hereditarias o adquiridas, también particularidades en su desarrollo.

BIOLÓGICOS
  •         ADN
  •       Edad
  •       Herencia (familias criminales)
  •       Daños cerebrales
  •         Alteraciones orgánicas


PSICOLÓGICOS
  •   Trastorno disocial: se caracteriza por un patrón de comportamientos que viola los derechos básicos de los demás o las principales normas o reglas sociales propias de la edad del sujeto
  •   Parafilias: se caracterizan por impulsos sexuales intensos y recurrentes, fantasías o comportamientos que implican objetos, actividades o situaciones poco habituales. Estos trastornos producen malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo. Las parafilias incluyen el exhibicionismo, el fetichismo, la pedofilia, el masoquismo sexual, el sadismo sexual, el fetichismo transvestista, el voyeurismo y la parafilia no especificada
  • Episodio depresivo : es un período de al menos 2 semanas durante el que hay un estado de ánimo deprimido o una pérdida de interés o placer en casi todas las actividades
  •  Esquizofrenia: es una alteración que persiste durante por lo menos 6 meses e incluye por lo menos 1 mes de síntomas de la fase activa (p. ej., dos [o más] de los siguientes: ideas delirantes, alucinaciones, lenguaje desorganizado, comportamiento gravemente desorganizado o catatónico y síntomas negativos). También se incluyen los subtipos: paranoide, desorganizada, catatónica, entre otras
  •   Explosivo intermitente : se caracteriza por la aparición de episodios aislados en los que el individuo no puede controlar los impulsos agresivos, dando lugar a violencia o a destrucción de la propiedad
  •  Paranoide : es un patrón e desconfianza y suspicacia que hace que se interpreten maliciosamente las intenciones de los demás
  •  Antisocial : es un patrón de desprecio y violación de los derechos de los demás
  •   Límite : es un patrón de inestabilidad en las relaciones interpersonales, la autoimagen y los afectos, y una notable impulsividad
  •    Histriónico: es un patrón de emotividad excesiva y demanda de atención
  •     Narcisista: es un patrón de grandiosidad, necesidad de admiración y falta de empatía
  •   Evitación: es un patrón de inhibición social, sentimientos de incompetencia e hipersensibilidad a la evaluación negativa
  •   Dependencia : es un patrón de comportamiento sumiso y pegajoso relacionado con una excesiva necesidad de ser cuidado


FACTORES EXÓGENOS: Son factores exógenos los que se refieren al ambiente natural (clima, lluvia, calor, frío, humedad, etc.) y los ambientes artificiales formados por el ser humano (el barrio, la vivienda, los medios de comunicación, etc.). El ambiente natural y artificial constituye un estímulo constante al que el sujeto interactúa continuamente.


    
   
   BENIGNO DI TULLIO

Todos los individuos, en circunstancias especiales, pueden llegar a un estado de alteración, pues somos individuos que tenemos una particular tendencia al desarrollo y a diversos procesos de desintegración de la personalidad, con las consiguientes perturbaciones graves en su conducta. Hay que realizar el estudio del delincuente en su personalidad total; es decir, que no se puede estudiar aisladamente los factores psicológicos, biológicos o sociológicos sino en su totalidad.

Para DI TULLIO, el tratamiento debe estar basado en el conocimiento de la personalidad del delincuente, reconoce que el modificar la personalidad antisocial es difícil, pero conforme el progreso de las ciencias esto se logrará. Tomar en cuenta un tratamiento médico, psicológico, pedagógico y sociológico, implican tener un conocimiento profundo del sujeto.

CÉSAR LOMBROSO

Médico italiano, es considerado como el iniciador de los estudios sistemáticos criminológicos clínicos. Estudió y observó a numerosos delincuentes en las prisiones. Intentó investigar las diferencias entre el enfermo mental y el criminal. Creyó encontrar las respuestas analizando los cráneos de delincuentes, observando anomalías y deformaciones.

LOMBROSO señala que la criminalidad es un tipo de agresión excepcional, es anormal y patológico, considera que el delito es el resultado de la interacción entre los factores criminógenos internos y externos; para él, el delincuente es un ser insensible, de personalidad psicopática. Es importante hacer la observación y clasificación clínica sobre los delincuentes para revelar su personalidad y hacer un diagnóstico criminológico, así mismo llevar a cabo un tratamiento, junto con LOMBROSO, sus discípulos, FERRI y GARÓFALO, señalan también la importancia de estudiar las causas del delito; es decir, el desarrollo del individuo y la interacción de diversos fenómenos a lo largo de su vida.

JOSÉ INGENIEROS

En Latinoamérica los trabajos de JOSÉ INGENIEROS a través de la Psicología Clínica y la Criminología Clínica, fueron desarrollados en el Instituto de Criminología de la Penitenciaria Nacional de Argentina. INGENIEROS señala: “todo acto delictuoso es la resultante de causas” y puntualiza la labor criminológica en tres áreas: 

1. Etiología del crimen. Es el estudio de las causas del delito; 
2. Clínica Criminológica. Las diversas formas en que se manifiestan los actos delictivos, es el estudio de la personalidad del delincuente; y 
3. Terapéutica Criminal. Estudia las medidas sociales e individuales en el tratamiento del delincuente.

ETIENNE DE GREEFF

Es considerado como “el Padre de la Psicología Criminal”, tienen el gran mérito de haber aplicado la experiencia psiquiátrica y criminológica a la comprensión mental del criminal, integrando conceptos biológicos, sociológicos y patológicos. Considera esencial el estudio de la personalidad que conduce al conocimiento de la diversidad de factores y la interacción entre éstos para el resultado criminal, ya que la conducta es la consecuencia de las condiciones biológicas, sociales y psicológicas a las que el sujeto es sometido. Hay que tratar de comprender al ser humano en la totalidad de su persona. Señala que hay que conocer al delincuente de acuerdo a su pasado en relación con el medio actual.
Para DE GREEFF los siguientes rasgos son esenciales en el diagnóstico criminológico: la agresividad, el egocentrismo y la indiferencia afectiva.

HESNARD

Explica que la investigación criminológica implica buscar a profundidad la personalidad del criminal. Se refiere a un estudio minucioso de la personalidad antisocial, en relación con su medio que lo circunda. Para él, el conocimiento humano no debe limitarse sólo a encasillar su conducta delictuosa sino que debe hacerse un análisis psicológico. Igualmente advierte que se deben considerar varios aspectos en el estudio de la personalidad antisocial: la insensibilidad absoluta al respeto a la vida ajena, un egocentrismo de omnipotencia y de poder incontrolable y sadismo de dominación. También dice que el delincuente minimiza a su víctima y la ve como un ser débil y pobre.

JEAN PINATEL

Para Jean PINATEL, la etiología de la criminalidad es un conocimiento total para poder realizar el tratamiento y tomar las medidas preventivas de la delincuencia, esta etiología se considera a través del estudio, examen y tratamiento de la personalidad del delincuente, ésta es para PINATEL, un concepto operacional, un instrumento clínico, que permite conocer el grado de peligrosidad y evaluar los efectos del tratamiento. La personalidad es inseparable no solamente del organismo sino de la sociedad, por ello la importancia del estudio de ésta para la Criminología.
Los componentes de la personalidad criminal están integrados según PINATEL por: el egocentrismo, la labilidad, la agresividad y la indiferencia afectiva.

ALFONSO QUIROZ CUARÓN

Para Alonso QUIROZ CUARÓN, la Criminología se puede llevar a cabo por medio de la Medicina para observar, diagnosticar, pronosticar y curar las enfermedades, es una Criminología Médica. El ser humano es el objeto de estudio de la Criminología Clínica y es él mismo el que da lugar al nacimiento de la Antropología Criminal, la Sociología, la Psicología, la Biología, etc. esto contempla una labor minuciosa en las observaciones de los delincuentes. Para él, son cuatro los rasgos dominantes de las personalidades psicopáticas: la irritabilidad, que, ante estímulos mínimos llegan a la ira, al disgusto y al pleito; la emotividad, una exaltación explosiva, por debilidad de mecanismo s inhibitorios; impulsividad, de ella nace el impulso, es espontánea e imprevista; y la inmoralidad, intensidad prepotente y egoísta, sin control.
QUIROZ CUARÓN destacó tres aspectos fundamentales de la práctica clínica:
*      La investigación clínica.
*      La implementación de una Clínica Criminológica en el sistema penitenciario, a nivel interdisciplinario, para el estudio del delincuente y su tratamiento.
*      La enseñanza de la Criminología en las Universidades.

STEPHAN HURWITZ

Para Stephan HURWITZ, la Criminología es el estudio empírico de los factores individuales y sociales sobre los que se asienta la conducta criminal. La Criminología se orienta primariamente hacia la etiología del crimen. HURWITZ realiza un exhaustivo análisis de la base biológica de la criminalidad, de los factores hereditarios en familias criminales y profundiza además en la importancia de los factores psíquicos de la criminalidad describiendo las distintas enfermedades mentales relacionadas con el delito; a saber: actualmente se observan como conductas peligrosas los sujetos que como el paranoico, el antisocial, el límite, el histriónico, el esquizofrénico (desorganizado, catatónico, paranoico, bipolar), el autista, el maniaco, el depresivo, entre otros.

RAZÓN POR LA QUE EXISTEN CADA VEZ MÁS CONDUCTAS ANORMALES

Los factores de riesgo:

v  Abandono en la niñez o en la adolescencia
v  Vida familiar disociada
v  Comunicación deficiente en la familia
v  Abuso sexual, físico o emocional

Las personas sanas difieren significativamente en la personalidad global, en el estado de ánimo y en el comportamiento. Cada persona también varía día a día, dependiendo de las circunstancias. Sin embargo, un gran cambio repentino, en la personalidad y/o en la conducta, en particular si no está relacionado con ningún acontecimiento obvio (como iniciar un tratamiento farmacológico o la pérdida de un ser querido), a menudo indica un problema.


INFOGRAFIAS







CONCLUSIÓN

Los aportes que la psicología ha brindado al estudio de la criminalidad han permitido que ésta realice un salto significativo en cuestión de predicción, investigación y responsabilidad; el elemento más destacado de este trabajo  es el estudio de la personalidad, sobre el cual la evidencia muestra que sí hay rasgos típicos de personalidad que tienen una relación directa con ciertas conductas criminales, así como rasgos típicos o patológicos, relacionados en mayor medida con dichas conductas, como son la alta impulsividad, poco control de emociones, la búsqueda de sensaciones y la hostilidad.

La psicología se ha caracterizado por ser una ciencia multidisciplinar, su participación en otras disciplinas suele ser activa, brindando aportes muy relevantes; es el caso de la psicología en el campo de la criminología, en el cual ha aportado elementos fundamentales para su desarrollo; uno de los aspectos más importantes que la psicología le ha brindado a la criminología han sido las conceptualizaciones sobre personalidad, el estudio de ésta y de sus rasgos, desde los más típicos hasta los patológicos, dándole un carácter predictivo y permitiéndoles adjudicar consecuencias o penas más justas para los sistemas jurídicos que se sirven de estas disciplinas. En este sentido se podía hablar directamente de una relación más específica: personalidad y criminalidad.




BIOGRAFÍAS

La Personalidad y la Criminología. Un Reto para la Psicología Anuario de Psicología Jurídica, vol. 18, 2008, pp. 99-111.

Arce, R. y Fariña, F. (2003). Avances en torno al comportamiento antisocial, evaluación y tratamiento. Madrid: Los autores.

Balaguer, A. y Peris, L. (2010). Protocolos de intervención. Trastornos de personalidad. Barcelona: EdikaMed, S.L. Becerra, J. y García, A. (2015). Relación entre Variables Neurocognitivas y Personalidad en Delincuentes [Relation ship between Neurocognitive Variables and Personality in Offenders]. Acción Psicológica, 11(2), 117-126.

Blanca, M., Cardenal, V., Fierro, A., Ortíz, M. y Sánchez, L. (2006).Factores de personalidad y delitos violentos. Psicothema, 18(3), 459-464. Clonninger, S. (2002).

Teorías de la personalidad. Ciudad de México: Pearson Educación. Esbec, E., & Echeburúa, E. (2010). Violencia y trastornos de la personalidad: implicaciones clínicas y forenses. Actas Españolas de Psiquiatría, 38(5), 249-261.





















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